Paul, un esperanzado futuro padre conducía a su embarazadísima novia Bárbara, a punto de dar a luz, al hospital. Para Paul no solo era su primer bebé, sino que también la pareja esperaba quintillizos. Y esto es lo que pensaba, tras tener su novia un embarazado de nueve meses con una enorme barriga. Pero cuando Paul vio a la comadrona supo que había sido víctima de una terrible mentira.
«Ella me permitió escoger los nombres», dice a Daily Mail un destrozado Paul que pensaba que iba a ser padre. «Perdí todo, era toda mi vida». Paul Servat conoció a Barbara Bienvenue por internet cuando tenía 35 años y enseguida se interesaron el uno por el otro y comenzaron una relación. Tras tener una intensa relación de dos meses, Barbara se quedó embarazada.
Iba a ser padre de quintillizos
Cuando Barbara le contó que iba a ser padre de gemelos, la alegría fue doble. Mientras la barriga crecía llegaron nuevas noticias: esperaban un bebé más. Finamente se confirmaron la llegada de cinco bebés que Barbara tenía en su barriga, o al menos eso es lo que ella dijo. Paul estaba muy contento y esperaba ansioso una nueva vida como padre. Cuando le dijo a sus padres que iban a ser abuelos, ambos se pusieron locos de alegría y compartieron su alegría en las redes sociales.
Condujo a su chica hasta la maternidad del hospital
Paul había preparado una habitación con cinco cunas, con la ayuda de varias personas, pues la crianza de cinco bebés no sería fácil. Y cuando llegó el momento de dar a luz, Paul llevó a su novia a la maternidad del hospital, esperanzado y nervioso.
Pero no había ningún niño
Pero la enorme alegría se convirtió en un auténtico chock. Cuando la comadrona realizó un análisis de sangre, los resultados llegaron como una auténtica pesadilla. No había ningún bebé. Pero no porque hubieran muerto dentro del vientre de la madre, la verdad era que nunca habían concebido ningún bebé. Su novia Barbara tenía un «embarazo psicológico». Se trata de una situación muy inusual, donde la mujer nota todos los síntomas del embarazo y así lo siente pero en realidad no lo está.
«Me dejó elegir nombres», dice Paul completamente destrozado; «yo creía realmente que iba a ser padre».
«He perdido todo, esto era toda mi vida«
El embarazo psicológico es una falsedad del cuerpo.
En vez de un parto Barbara fue sometida a un control psicológico. Posiblemente Barbara no se hizo una prueba de embarazo, y la pareja no habría realizado ninguna ecografía para confirmarlo.
Pero el engaño era de tal magnitud que incluso las comadronas pueden verse confundidas en una ecografía .El cuerpo es increíble y al tratarse de un embarazo psicológico, la revolución hormonal y los síntomas son tan fuertes que parece y sientes que estás embarazada. En el caso de Barbara, ella no estaba bien y mintió a Paul todo el tiempo. ¿Cómo alguien puede hacer algo así? ¡Es impensable! Siempre se aconseja chequear dos veces y no confiar solo en la palabra.
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